El Grupo Empresa Bazán, como ha ocurrido desde la llegada de Miguel Pérez al banquillo del equipo isleño, volvió a perder por la mínima en Ubrique (1-0), en partido de la jornada 14 en la Primera Andaluza senior, que se adelantó a este viernes en el estadio Pistas de atletismo de la bonita localidad de la sierra de Cádiz.

El partido fue un calco del que jugó hace cinco días ante el Tarifa. El GE Bazán mandó en el partido, generó numerosas ocasiones, pero entre su falta de acierto y la desastrosa actuación de la colegiada Zoila González Vargas, que no señaló un escandaloso penalti sobre Wiwi y, sin embargo, no dudó en pitar uno a favor del Ubrique, ya en el descuento, que supuso la expulsión de Juan Benítez y que detuvo el debutante Iván López.

La fortuna también le volvió a dar la espalda al Grupo Empresa Bazán, que en dos ocasiones se encontró con los palos en los remates de Wiwi (10') y Juanfran (70'), que también vio como en el segundo tiempo un defensa le sacaba un disparo bajo palos.

Por si fuera poco, el técnico Miguel Pêrez no pudo contar con Álex Ramírez, que se cayó a última hora tras pasar una mala noche y, encima, vio como en el primer tiempo perdía a Lolo Cocerria, que incluso tuvo que acudir al hospital tras sufrir un fuerte encontronazo, y Pacheco, que se retiró con problemas en un gemelo.

A pesar de tantas adversidades, el GE Bazán dio la cara, dejó una gran impresión y mereció mejor suerte, pero un desajuste defensivo propició que el Ubrique se adelantara en el minuto 56. El equipo isleño se volcó en busca del empate, pero en el 75 llegó el clamoroso penalti. Wiwi se marchó por velocidad y cuando encaraba al portero fue derribado por un contrario sin que la colegiada Zoila González Vargas se atreviera a pitarlo.

El técnico Miguel Pérez dice que "todo es cuestión de que nos entre la pelotita" y se queja de los arbitrajes. "En estos tres partidos nos han pitado tres penalties en contra y nos han expulsado a tres jugadores"

El joven técnico Miguel Pérez intentaba hacer una lectura positiva de la situación. "Todo es cuestión de que nos entre la pelotita y cuando ello ocurra todo cambiará porque el Bazán no está muerto, ni muchísimo menos", pero a la vez no puede ocultar su tremendo malestar con los arbitrajes. "En los tres partidos que llevo en el GE Bazán nos han pitado un penalti en contra y nos han expulsado un jugador en cada uno de ellos, pero a la vez nos han dejado pitar varios penalties a favor".