Los jugadores de Jorge Navarrete alternaban defensas cerradas y a veces 5:1 lo que hacía que el juego local no tuviera ritmo y estuviera muy errático en ataque. Si la defensa isleña cumplía su misión, el ataque no estaba muy afortunado, sin rapidez en el movimiento de balón y con fallos en los lanzamientos ante la puerta local.

A partir del minuto 15 los estepeños empezaron tomar la iniciativa en el juego, gracias a las paradas de su portero y sobre todo al acierto en ataque, lo que propició ventajas de 3 y 4 goles en el luminoso, lo que les permitió llegar al descanso ganando por 14-10.

En la reanudación los pupilos de Jorge Navarrete salieron más entonados sobre todo a nivel defensivo, con un 5:1 que desbarataba las acciones de los locales. Sin embargo, el ataque estaba romo y espeso, la primera línea era poco productiva y casi todas las acciones de gol venían por parte de los extremos.

La mejora defensiva isleña poco a poco empezaba a notarse y el marcador se estrechaba hasta igualarse, 17-17 en el minuto 46. Quedaba escasamente un cuarto de hora para la finalización del choque y se preveía un final muy igualado. Así fue hasta el minuto 55 del encuentro donde los isleños parece que desaparecieron de la pista, errando totalmente en ataque con absurdas pérdidas de balón y propiciando rápidas contras de los locales que se plantaban una y otra vez ante el marco isleño con suma facilidad.

El Habitalia encajó un parcial de 6-1 y tiró por la borda en los instantes finales todo el trabajo y esfuerzo realizado durante 55 minutos. A pesar de las bajas con las que viajaron, los isleños deben mejorar en ataque y sobre todo estar más concentrados y resolutivos en los momentos decisivos del encuentro