El filial del Club Balonmano San Fernando-Habitalia
sufrió una abultada derrota en Utrera (34-21), donde no tuvo
su día y acusó las bajas con las que viajó a la localidad
sevillana. El equipo que dirige Carlos Moriñigo no estuvo
nada acertado y, desde el pitido inicial, se vio dominado
por los locales.
En los primeros compases del encuentro ya se vislumbraba que
los isleños iban a tener el encuentro muy complicado. La
defensa 5:1 con mixta a Miranda no daba resultado y, además,
en ataque tanto las penetraciones como los lanzamientos
exteriores no tenían el fruto deseado. Los locales empezaron
pronto a poner distancias en el marcador, con ventajas que
iban entre 3 y 4 goles.
Con el
paso de los minutos el BM Utrera fue acentuando su dominio,
al no encontrar dificultades en una zaga isleña que mostraba
muy poca solidez, y además se aprovechaba de los errores
visitantes en ataque para lanzar rápidas contras. Un
contundente 18-10 al descanso dejaba el partido muy difícil
para los isleños.
Muy poco varió el panorama en el segundo periodo. El
Habitalia seguía dando muchas facilidades en la zaga y en
ataque se fallaban claros lanzamientos que podían acortar
las diferencias en el luminoso. Además, la pareja arbitral
siempre barría para casa ante cualquier jugada dudosa.
Los isleños estaban negados y ni los cambios que introdujo
su entrenador daban resultado positivo, por lo que las
diferencias en el marcador fueron aumentando poco a poco.
Mientras los locales tenían éxito en todo lo que lanzaban,
el Habitalia estaba totalmente negado cara al marco utrerano.
El último cuarto del encuentro fue de puro trámite. Los
sevillanos mandaban ya por 10 goles de diferencia, por lo
que ambos conjuntos estaban deseando que los colegiados
pitaran ya el final del mismo.
|