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La SD Candray, que acudió con sólo cuatro seniors y seis
juniors, cuatro de ellas de primer año, rozó la hombrada en
Sevilla (49-45) ante un rival como el Baloncesto Sevilla,
que ha confeccionado un gran plantel y es claro favorito
para acabar entre los dos primeros clasificados de la
Primera Nacional femenina.
Dada la desigualdad de fuerzas, el objetivo de las isleñas
era jugar y luchar, sin fijarse en el marcador, y así lo
hicieron, con un inicio trepidante y que le dio una ventaja
de 2-10 en el minuto 4. Ahí llegó la reacción de las
sevillanas, que lograron un parcial de 17-0 para acabar el
primer cuarto con ventaja de 19-10.
Esa ventaja se mantuvo hasta mediado del segundo cuarto,
pero la SD Candray no se amilanó y con siete puntos
consecutivos de Carlota Prieto y Paula Nolasco, por dos de
las sevillanas, se alcanzó el descanso con una renta de sólo
siete puntos de diferencia para las hispalenses (30-23).
Tras el descanso, el partido discurrió bajo los mismos
cánones. Las chicas de Cristóbal García defendían a muerte,
lo que provocaba que su rival no pudiera anotar canastas
fáciles y que al final del tercer cuarto se mantuviera la
emoción en el marcador con el 40-36, algo impensable antes
del partido.
En el inicio del último periodo, las isleñas creían en sus
opciones de ganar el partido y peleaban como jabatas por
cada balón. Un triple de Carlota Prieto ponía a la SD
Candray a sólo un punto (40-39) e, incluso, tras seis puntos
conseguidos entre Paula Nolasco y Sheila Valencia, se colocó
por encima (43-43) y luego 44-45.
Las sevillanas tenían el miedo metido en el cuerpo, pero su
mayor experiencia y un par de balones perdidos por las
isleñas privaron a la SD Candray de dar la campanada y
conseguir la victoria. A pesar de ello, hay que destacar el
trabajo de todo el equipo y donde las juniors María Miranda,
Andrea Jaén, Carlota Prieto, Sofía Rozados, Nuria Guerra y
Julia de Enciso dieron la talla y se han hecho acreedoras a
la continuidad.
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