El Grupo Empresa Bazán comenzó la temporada con una derrota ante el San Bernardo en la Estación de San Roque (2-0), que se antoja inexplicable por lo sucedido en el partido, donde el equipo isleño dio cuatro veces en los palos y vio como el árbitro no señaló ninguno de los tres claros penalties que hubo en el área local.

El equipo de Jesús Pecci que, de manera incomprensible, viajó con sólo dos reservas a pesar de la amplitud de su plantilla, se mostró muy superior en la primera mitad. En el minuto 3 Andrés Ocaña lanzó una falta y el balón pegó en la cruceta. En el 6 Dani Curbelo robó un balón en la salida desde atrás del San Bernardo y asistió a Ureba, que remató al poste.

En el minuto 18 llegó un penalti sobre Tati Maldonado que el árbitro pasó por alto y en el minuto 25 llegó el primer remate de los locales, tras una falta que lanzó Heredia y que se escapó cerca del poste. A la media hora llegó el 1-0, en un centro chut de Joel que sorprendió al meta del GE Bazán, Juanjo, y se coló por el segundo palo. Con esa ventaja del San Bernardo se alcanzó el descanso del encuentro.

La segunda mitad comenzó con otro jarro de agua fría para el GE Bazán tras un barullo en el área isleña que resolvió Eden para colocar el 2-0 en el marcador. A partir de ahí, el equipo isleño se volcó materialmente sobre el área rival y las ocasiones se sucedieron una tras otra, pero sin fortuna.

En el minuto 52, Tati Maldonado se plantó en solitario ante el meta local y terminó rematando al lateral de la red. En el 60 fue Valentín el que remató fuera, de cabeza, estando completamente solo. Un minuto después llegó un remate de Ureba al larguero.  

El gol de la esperanza no llegaba y es que la fortuna dio la espalda por completo al Bazán, que se encontró de nuevo con el larguero en una falta que lanzó Dani Curbelo. En el 85 hubo un penalti a Javi Muñoz que tampoco fue señalado. El propio jugador del GE Bazán pudo marcar, de falta en el 87, pero lo evitó el meta Víctor con una soberbia estirada para sacar el balón de la escuadra. Y en el descuento, el colegiado volvió a jugársela al Bazán al pasar por alto otro penalti muy claro sobre Ureba.